La infelicidad parte de la búsqueda de aprobación externa. Ese error común que se comete cuando esperamos que otros aprueben lo que hacemos, y nos censuramos si creemos que no lo hacen.
Cuando intentamos satisfacer a otros estamos siendo lo que otros esperan. Esto nunca nos hará feliz, además, cuando estamos siendo algo que no es autentico y por lo tanto no vibramos genuinamente, atraemos energías que no son genuinas tal cual como la que estamos vibrando, y en el mejor de los casos que sea genuina, no será reflejo de lo que realmente somos. Así que en cualquiera de estos casos no nos brindará satisfacción permanente.
He aquí la importancia de la aceptación y autenticidad para ser honestamente feliz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario